La marca alemana Adidas elevó este martes sus objetivos anuales, animado por un negocio que ha evolucionado «mejor de lo esperado» en el tercer trimestre gracias, sobre todo, a la venta del último stock de zapatillas Yeezy. Esta decisión se explica por los resultados del tercer trimestre de la empresa, menos malos de lo previsto, con una caída de las ventas de sólo el 6 % interanual y un margen operativo del 6, 8%, es decir, 2,0 puntos porcentuales menos.
Adidas espera acabar el ejercicio completo con una reducción de la cifra de negocio de entre el 1% y el 3%, frente al rango del 4% y el 6% que pronosticaba hace unos meses. Por su parte, se espera que su beneficio de explotación, excluidos los efectos excepcionales, «alcance los 100 millones de euros», en lugar del «punto de equilibrio» de las estimaciones anteriores.
Los «buenos» resultados de este último trimestre se vieron positivamente impactados por la venta de parte del stock restante de Yeezy (cabo recordar que el fin de las ventas de las lucrativas zapatillas Yeezy diseñadas con Kanye West había sumido al grupo en números rojos a finales de 2022 y principios de 2023) y, también por la recuperación del mercado chino.
Fuente: Tradesport.
