Y lo ha sido por muchas razones:
– Vivir la carera en directo a su paso por Barcelona, una experiencia increíble.
– La vuelta del mejor ciclista que yo he visto, el gran Lance Armstrong, volviendo después de dejar el ciclismo y acabando en el tercer lugar, casi nada.
– La última semana de competición, unas exhibiciones de ciclismo en estado puro
– El fervor con lo que lo viven los aficionados en directo, en algunas etapas de montaña casi no podían ni subir de la gran cantidad de gente que había.
– Las exhibiciones de Contador, no sólo en la montaña sino también contra el crono. Tenemos campeón para rato 😉
Por todo esto y mucho más, esperaremos ansiosos ya el próximo Tour 😉