Este fin de semana ocurría un hecho totalmente deplorable dentro del deporte, y más tratándose de divisiones inferiores y con jóvenes jugadores, la agresión de un equipo formado por “Boixos Nois” (da igual del equipo del que sean seguidores) a uno formado por inmigrantes de paises de Sudamérica y catalanes.
Yo conozco al presidente del club Rosario Central (uno de los agredidos) y doy fe del esfuerzo que están haciendo para promocionar el deporte catalán entre sus paisanos y todos aquellos que quieran apuntarse a su club para competir en ligas de Catalunya, es lamentable que avisando a la Federación Catalana y a los Mossos semanas antes del partido de que habían recibido amenazas, ésta no hiciera nada para protegerlos o, en su defecto, aplazar el partido.
Gente que quiere promocionar el deporte y la integración en nuestro país no se merece un trato tan malo por los dirigentes del fútbol catalán y más aún cuando, seguramente, no tienen ni idea de lo que pasa en el fútbol base, la “pedrera” del futuro, esperemos que al menos tomen medidas para que no vuelvan a ocurrir nunca más episodios como estos.