Este ha sido un fin de semana diferente, muy diferente y es que nos hemos ido al pueblo a celebrar el carnaval, sí, sí, el carnaval, lo sé, unas semanas más tarde de lo que tocaba pero se ve que aquí (Cetina) es una tradición y ante eso nada podemos hacer, ha sido un fin de semana festivo y de encuentro con buenos amigos.
Teníamos que aprovechar el tiempo a tope con lo que el viernes a primera hora de la tarde ya salimos para allí y así cenar en el pueblo tranquilamente para luego salir a tomar algo con los amigos que, con la gran mayoría, desde verano no nos habíamos vuelto a ver, pasamos un buen rato esperando el gran día de la preparación para los carnavales del sábado.
Durante todo el día estuvimos preparando los uniformes que íbamos a llevar por la noche, la verdad es que quedaron muy pero que muy bien, luego cena todos juntos y directos a disfrutar de la noche con nuestros disfraces, estuvo genial la verdad y hacía años que no llegaba tan tarde a casa, el domingo tocaba descansar un poco para volver otra vez a casa, el año que viene más, seguro 😉