Los últimos días de la semana pasada no parábamos de escuchar en las noticias las posibilidades que tenía Madrid de ser sede olímpica en 2016, se decidía todo y las ciudades candidatas ponían a sus figuras al frente, evidentemente unas más que otras.
Que si iba Obama, si nosotros teníamos al Rey, Lula también participaba, unos podían influir más otros menos sobre los miembros del CIO con derecho a voto (se supone que sin sobornos como pasaba antiguamente por parte de alguna candidatura) y al final el resultado fue el previsto, Rio, la ganadora que querían todos…
La verdad es que esta decisión, creo yo, ya está en gran parte tomada con anterioridad a todo el montaje de ensayos, presentaciones, figuras mundiales, etc…de los últimos días, pocos votos más puedes conseguir, si se planifican bien las cosas, si las obras son reales, si el presupuesto es creíble, …, en definitiva si el proyecto es bueno y cuenta con el apoyo incondicional de todos es muy posible que seas la elegida, eso sí, también es muy importante –básico- saber mover muy bien los “hilos” por detrás y en eso Rio ha sido una experta durante los últimos años.