La tecnología ha cambiado el modo de practicar y consumir deporte. El análisis de datos, la inteligencia artificial, la realidad virtual o las nuevas posibilidades que ofrece el streaming han elevado tanto la asistencia a eventos deportivos como su consumo en diversas plataformas, a la vez que aumenta la compra de productos relacionados. Según Capgemini, la buena experiencia con las tecnologías emergentes ha permitido que un 91% de los aficionados haya incrementado el gasto en las tiendas oficiales, adquirido más comida o bebida en los estadios o se haya suscrito para disfrutar de un mayor número de competiciones a nivel mundial.
La consultora indica en un informe que la innovación en el campo deportivo no solo ha mejorado el desempeño atlético de equipos y deportistas, sino que ofrece una significativa oportunidad en términos de valor de marca y crecimiento gracias a la mejora de la experiencia del aficionado. Un aspecto que tanto clubes como estadios exprimen para que el espectador sea parte del juego.
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